domingo, 14 de febrero de 2016

Carta a mi querida madre.

Querida madre,
quisiera no tenerte que decir
la añoranza que yo siento
al estar lejos de ti.

No controlo mi congoja,
ni mis lágrimas por ti;
te lloraré mucho tiempo.
Me dejaste. Te perdí.

Te quiero, madre, te quiero.
Y aunque lejos de mi lado,
te contaré el transcurrir
de los que aquí hemos quedado.

Nunca llenaré el vacío
que tú dejaste en mi alma,
al marcharte de mi vida
de manera inesperada.

Un beso, madre querida.
Si te llega con retraso,
es porque te encuentras lejos.
El Cielo no está cercano.

Te compensaré algún día
por los muchos que han faltado.
Será cuando estemos juntas.
Cuando yo vaya a tu lado.

Conchita Zabala.

No hay comentarios:

Publicar un comentario